¿¡Y por qué... Febrero!?

Y en un 2x3, llegó Febrero: ¡El mes del Amor! Seguramente muchos podemos sentirnos demasiado bien, ¡o demasiado mal!; sea cual sea el caso, en realidad lo mejor es permanecer optimistas, y eso si... bien parados en nuestros dos pies. No por ser Febrero un mes donde se celebra el amor, hay que tener obligatoriamente una pareja para celebrarlo. Recordemos que el amor comienza por nosotros mismos... Así que, si estamos solos lo mejor es sencillamente darnos un abrazo en la búsqueda de claras definiciones que nos ayuden a entendernos... ¿Quién soy? ¿Qué quiero?, podría ser un buen momento para proponerse metas, y siempre siempre alegrar el corazón propio. ¡Hagamos lo que nos gusta! Disfrutemos con nuestra familia o amigos, vayamos al cine, comamos helados -pero comprarlos y comerlos en casa, ¡una caja de helado bien grande!-. Disfrutemos, ¡salgamos a bailar!

Febrero es más bien un mes para celebrar la vida con diversión y muchos ánimos. ¿Esa canción que tanto te gusta? ¡Cántala! Vamos, toma aire y atrévete a practicarla frente al espejo, con baile y todo. ¿Amor? ¡Claro! Empecemos por amarnos a nosotros mismos, por sentirnos en confianza en nuestra propia piel, y así poder salir en los próximos días a la calle y causar sensación.

No hace falta que una fecha en el calendario te haga llamar a un viejo amigo, o recordar a un familiar lejano. Ahora es el momento preciso, para reunir unas monedas y darte un viaje al teléfono. Un mensaje, un gesto... todo sea por mantener buenas y sanas relaciones con las personas que aún tienen especiales lugares en tu corazón. Quizás, Febrero nos sirva para redecorar el interior de ese órgano vital, que tanto nos hace perder la cabeza. Hablando de perder la cabeza, no olvidemos que si tenemos pareja y decidimos salir a celebrar el amor cuerpo a cuerpo, lo mejor es disfrutar del encuentro prevenidos y protegidos. Aunque estemos en una relación estable con una sola persona, es bueno permanecer comprometidos al uso de los preservativos en la cabeza y en el cuerpo. Febrero de helado, de sonrisas, llamadas o mucha cama... Lo importante es que pinte bonito, un Febrero Inolvidable... ¡justo ahora!

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